martes, 26 de enero de 2010

Escenario

De acuerdo, vuelvo a interpretarme: reitero la autenticidad, y supongo que a veces resulta todo exagerado. La risa es tan franca que parece fingida, los silencios se cargan de semejante sentido porque no son treguas para evaluar estratagemas: es simple necesidad de comprobar que todo esto (TODO ESTO) es real.

Ya viene. La casa está bonita porque es bonita. Yo huelo bien porque todos los días -con o sin él- me perfumo antes de secarme. Y sonrío si le intuyo alegre porque es así como me gusta que esté.

Glorioso día aquel en el que comprenda cuánto encajan la imagen y el cuerpo.

3 comentarios:

  1. En general no soporto los perfumes (ni los olores corporales fuertes: tengo la nariz de un lebrel). Me gustan los jabones y el olor (el 'no' olor) a limpio. Mi sistema: lavarse con un jabón de olor y secarse al aire...

    Qué bonito verte entregadamente enamorada...

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  2. Yo huelo bien, Lansky. A té verde, como la pared que pinté.

    Gracias por pasarte por aquí...¡podenco!

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  3. Me gustan los podencos, mucho.
    Y las chicas que huelen a té verde...uhmm. mucho también.

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Oh, ¡hay vida!